CONSEJOS Y MANTENIMIENTO
Como todo objeto valioso e instrumento de precisión, los relojes Breitling requieren una atención específica a la hora de utilizarlos y revisarlos. Con estos consejos, podrá aumentar su vida útil, garantizar un funcionamiento óptimo y mantener su belleza.
Limpieza
Cuando los productos cosméticos, el sudor o el polvo entran en contacto con la caja del reloj o el brazalete metálico, puede irritarse la piel y, a largo plazo, oxidarse el acero. Para evitar que se acumulen estos productos, limpie el brazalete metálico periódicamente con un cepillo de dientes y jabón líquido, enjuáguelo con un poco de agua y séquelo con un trapo absorbente. La caja del reloj puede limpiarse con un trapo húmedo (o enjuagarse con cuidado si el modelo es apto para actividades acuáticas) y también debe secarse.
Correas de piel
Como todos los objetos de piel (zapatos, bolsos etc.), las correas de piel necesitan un cuidado para mantener su belleza a largo plazo. Proteja su correa de piel del agua, el sudor, la humedad, la grasa, el perfume, los cosméticos o los productos químicos y evite que esté demasiado tiempo al sol. Con el kit de cuidados de Breitling (disponible en los establecimientos de nuestra marca), su correa de piel durará más tiempo y conservará su aspecto y la sensación de flexibilidad. En caso de que se moje la piel, séquela de inmediato con un trapo.
ENJUAGUE
Cada vez que se bañe en agua salada o con cloro (siempre que su modelo sea apto para actividades acuáticas), enjuague el cuerpo y el brazalete metálico con cuidado con un poco de agua y séquelos con un paño absorbente. Las correas de piel no son aptas para su uso en entornos muy húmedos o mojados. En caso de que el cuero se moje, séquelo de inmediato con un trapo.
ELECCIÓN DE LA CORREA/DEL BRAZALETE
La piel y el agua no hacen buenas migas. Si va a practicar actividades acuáticas o va a estar en lugares muy húmedos, donde haya agua o el clima implique que sude con frecuencia, opte por un brazalete metálico o una correa de goma.