En 1936, Breitling presentó un cronógrafo para aviadores, con esfera negra, sugerentes dígitos y manecillas luminiscentes, un bisel rotatorio con un práctico y versátil puntero de flecha que también brillaba en la oscuridad. Constituyó el principio de un vínculo con la aviación que mantiene su vigencia hasta el día de hoy. Los relojes para pilotos Breitling han destacado durante décadas. No es de extrañar que los pilotos, las aerolíneas y los fabricantes aeronáuticos los consideren los mejores relojes para la aviación del mundo.
Desde hace más de 65 años, el Navitimer de Breitling es uno de los cronógrafos mecánicos más admirados del mundo. La gama Navitimer presenta una leyenda de la relojería a toda una generación nueva.